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Maestro Tabárez habló en conferencia luego de la eliminación de Uruguay en los Juegos Olímpicos. “Cumplimos con el objetivo mínimo de luchar hasta el final”, afirmó.
“Salimos a buscar otra cosa y no la conseguimos. Pero me voy con la imagen de un equipo que dejó todo en la cancha”, arrancó diciendo Tabárez luego del 1-0 en contra frente a Gran Bretaña. El equipo se vio nuevamente superado en estos Juegos Olímpicos y encontró la eliminación de la competencia antes de lo esperado por el mundo entero: “Encontramos un equipo enfrente bastante más afianzado y que impuso superioridad. De todas formas creamos chances muy claras en el segundo tiempo que lamentablemente no se pudieron convertir. Cumplimos con el objetivo mínimo de luchar hasta el final. Por parte del cuerpo técnico no podemos reprochar nada. Estamos tristes, obviamente, pero sin creer que los futbolistas le deben algo a alguien”, dijo Tabárez.
Antes de los Juegos, nadie hubiese pensado que Uruguay marcaría solamente dos goles en tres partidos, y que pasaría las dos últimas fechas sin marcar. Mucho menos que Edinson Cavani y Luis Suárez se fueran sin anotar. Acerca de los dos delanteros el Maestro dijo: “Cuando decidimos que integraran el plantel fue pensando en sus capacidades goleadores ya demostradas y que la van a seguir teniendo. Una de las causas de no conseguir los resultados fue por malograr una buena cantidad de situaciones que tuvimos. Esto es el fútbol. Son circunstancias. Hicimos lo mejor posible en el tiempo que tuvimos para prepararnos. Evidentemente no alcanzó para pasar el grupo”.
“Si nosotros tuviéramos una organización y un nivel de futbolistas Sub 23 como para prescindir de los futbolistas mayores de edad, lo hubiésemos hecho porque creo que es lo mejor para un proceso de Selección. Pero cuando los plazos son cortos se necesita la capacidad de algunos jugadores para compensar la falta de nivel colectivo”, continuó el Maestro.
Tabárez insistió en rescatar la entrega del equipo como lo más positivo: “Como todas nuestras selecciones se dejó todo en la cancha hasta el último momento. A diferencia del partido con Senegal, hoy el juego fue más continuo. En el segundo tiempo de a poco se fueron solucionando problemas y se crearon situaciones. Podemos sacar conclusiones pero más individuales para el proceso”.
El capitán de la selección uruguaya Sub 23,
Luis Suárez, pidió perdón a la gente por no haber podido pasar de fase.
“Tanto la gente como nosotros estábamos con mucha ilusión y ganas de poder cumplir el objetivo”, dijo.
Luis Suárez habló con Sport890 apenas terminó el partido y lo primero que le salió decir fue pedir disculpas. “Pido perdón porque tanto la gente como nosotros estábamos con mucha ilusión y ganas de poder cumplir el objetivo. No pasamos la primera fase y obviamente que para nosotros es una desilución por todas las expectativas que había puestas en nosotros”, dijo Suárez.
El capitán Celeste fue silbado en cada uno de los partidos que debió jugar por la fase de grupos: “Ya estoy acostumbrado a que me silben, cada vez que voy a jugar un partido de visitante en Inglaterra me chiflan. Soy bastante grande como para saber sobrellevar esa situación”, afirmó el hombre del Liverpool, y agregó: “Lo que sí me molestó fue que silbaran el himno de Uruguay. Les faltó ser un poco más respetuosos”.
Acerca del partido de hoy con derrota frente a Gran Bretaña por 1-0, Suárez dijo: “Lo que faltó hoy y el otro día fue suerte. El otro día también tuvimos muchas situaciones de gol. No tengo nada de rencor ni nada para decirle a los compañeros porque dejaron todo adentro de la cancha hasta el último minuto”.
Con evidente dolor en su voz Suárez dijo: “Quedé dolido porque estábamos con mucha ilusión y muchas ganas. Nos sentimos un poco en deuda pero la gente también habrá visto la entrega que tuvimos y por ese lado habrá quedado contenta. Cuando no quiere entrar no quiere entrar. Ahora no hay palabras”.
Ramón Arias se responsabilizó del gol de Gran Bretaña luego del encuentro. “De ahí llegó la diferencia y quedamos afuera”, dijo el hombre de Defensor Sporting. También habló el Torito Rodríguez.
El zaguero urguayo,
Ramón Arias, de incidencia directa en el gol que significó el 1-0 para Gran Bretaña con el que el equipo local ganó el partido, habló luego del encuentro con Sport890 y dijo: “Tuvimos que arrancar siempre desde atrás por errores nuestros. En el gol no cerré de manera adecuada. De ahí llegó la diferencia y quedamos afuera”.
Por su parte,
Diego el “Torito” Rodríguez también habló del gol al mismo medio y dijo: “Estamos muy dolidos por quedar afuera en esta primera instancia. El gol no vi bien cómo fue. Creo que fue una pelota que vino al medio, que me chocó, pero no lo recuerdo muy bien.”
La selección de vuelve a Uruguay luego de haber comenzado el certamen como una de las claras favoritas a nivel mundial para quedarse con la medalla. Arias dijo: “Fue una desgracia no haber podido encontrar el resultado ni la clasificación. Nos deja muy tristes”.
El zaguero de Defensor Sporting terminó diciendo: “Nadie quería ni esperaba quedar afuera así, de esta manera. Pero nos miramos todos a la cara y sabemos que dejamos todo adentro de la cancha y eso nos deja tranquilos”.
Gastón Ramírez dijo que no se tienen que poner la mochila de la selección mayor: “Por ahí la gente esperaba que rindiéramos como ellos. Pero hay que entender que este grupo recién está armado”, afirmó.
Gastón Ramírez fue sin dudas uno de los jugadores que más rindió en los tres partidos que jugó Uruguay en los Juegos Olímpicos. Marcó uno de los dos goles que anotó la Celeste en el certamen y remató dos pelotas en los palos en los últimos dos encuentros.
El enganche es uno de los futbolistas que integra ambos grupos, tanto el de la Sub 23 como el de la selección mayor, al mando del Maestro Tabárez. Por lo tanto es el indicado para declarar como lo hizo. “No hay que ponerse la mochila que tiene la selección mayor. Por ahí la gente esperaba que rindiéramos como ellos. Pero hay que entender que este grupo recién está armado y hay muchos jugadores que debutaban en la selección”, dijo Ramírez a Sport890, luego del encuentro frente a Gran Bretaña.
Ramírez destacó lo positivo de este desafío por una medalla olímpica que no se pudo cumplir: “Hay que ver el lado positivo que es que el grupo siempre quiso y lamentablemente no alcanzó”.
Sebastián Coates fue otro de los que habló con Sport890 luego del encuentro y dijo: “Estamos con bronca pero tranquilos porque se dejó todo. El fútbol es así, nos tocó empezar perdiendo todos los partidos pero lo importante es que corrimos cada pelota como si fuera la última”.
Game Over
Callado, Uruguay se fue de Londres 2012. Gran Bretaña fue más de principio a fin y ganó bien 1-0. Queda un gusto amargo por la ilusión rota, pero al equipo le faltó funcionamiento para pelear el podio.
Fue rápida la aventura. Fue dolorosa. Pero especialmente fue aleccionadora, porque a veces uno cree tener más de lo que tiene. Y la ilusión de medalla que había con esta selección no tenía fundamento. Obvio, lo recordamos con el diario del lunes. ¿Había otra forma? Era la primera vez que esta Sub 23 reforzada se presentaba oficialmente.
Y al presentarse demostró que jamás pudo conseguir el funcionamiento necesario para meterse en el podio. Rolín, Arias, Aguirregaray, Calzada, Urreta, Lodeiro, Ramírez y compañía son jugadores de calidad, que pueden sumar en otra circunstancia, agregados a una idea ya aceitada. Una idea que no se pudo construir a tiempo para Londres 2012.
Marcas fácilmente perdidas en la pelota quieta, presión sin coordinación, incoherencia de los laterales para sumarse al ataque, espacios mal ocupados en la mitad del campo. Algunos detalles que hacen la diferencia en el fútbol y que son la base del éxito que Tabárez consiguió con la selección mayor, que los tiene digeridos como una pastilla.
Detalles que permiten al DT plantear los partidos con esa mezcla conservadora y oportunista que tantas sonrisas generó. Al no estar, derrumbaron esa estrategia típica del Maestro e hicieron inviable cualquier dominio táctico en los tres partidos del grupo.
Ahora vendrá el reclamo a los nombres que Tabárez se guardó en el banco y a los que ni siquiera llamó. Pero ni Forlán ni Polenta ni Abel Hernández habrían modificado esta realidad. El DT llevó lo mejor que tenía y no fue suficiente: él mismo lo admitió guardándose un cambio ante Gran Bretaña. No faltaron apellidos, sino una articulación colectiva que apenas apareció en un lapso del segundo tiempo con Emiratos Árabes.
Seguramente Tabárez confiaba en sus dos estrellas para tapar con goles algunas de las deficiencias, como pasó en el amistoso con Chile. Pero al final siempre ganan los equipos y Uruguay nunca lo tuvo. Suárez y Cavani defraudaron y deben ser criticados, pero debían tener dos semanas inolvidables para cumplir el sueño de la medalla.
Faltó rebeldía, pero la presencia de Lugano poco habría hecho. Este equipo no tuvo rebeldía porque se fue asumiendo inferior a los rivales. Tanto Senegal como Gran Bretaña lo redujeron por enorme parte del partido al rol de espectador, siempre corriendo de atrás reloj, resultado y pelota. Siempre un hilo físico por debajo de los de enfrente. Aunque duela admitirlo, los propios jugadores se percataron de esa realidad.
Así se entiende en las protestas constantes de Coates, las órdenes infructuosas de Arévalo, los remates impotentes de Cavani y el esfuerzo resbaladizo de Suárez. Cuatro referentes que llegaron con más ilusión que nadie, pero que comprendieron que lo que lograron con la mayor es, como dice su entrenador, la recompensa a un largo camino.
Esta Sub 23 no tuvo ese camino. Por eso hay que dejar el enojo a un lado y la radicalidad en el cajón. La temprana eliminación nos recuerda que parte de esta generación de jugadores fue vapuleada por Brasil en el Sudamericano y la otra parte no tuvo buenos Mundiales en la categoría. Es decir, puestos en la élite, se fueron sin títulos.
Forman un proceso que culmina en la mayor y crece día a día. Un proceso que tiene como principal objetivo ser potencia regional y clasificarse a todos los Mundiales y a cada Juego Olímpico. Ese objetivo se sigue cumpliendo. No se puede ganar todo.
Lo mejor: Campaña…y eso que tuvo escasas acciones peligro. Es que, ni en lo individual ni en lo colectivo Uruguay tuvo algo para destacar. A lo largo de los tres partidos el arquero de Cerro Largo mostró seguridad y confianza, como para tenerlo en cuenta en la mayor.
Lo peor: Arias. Jugó muy mal. Desbordado por la punta izquierda en el primer tiempo y por la derecha en el segundo. Jamás pasó la mitad de la cancha y encima entregó la pelota en cada lateral que realizó, uno con una distracción insólita.
La joya: Bellamy. Acostumbrado a verlo siempre como extremo, el veterano volante demostró gran capacidad atlética y táctica para cubrir espacios en defensa, siempre jugó con inteligencia la pelota y marcó diferencias cuando se animó con la gambeta.
La chatarra: el torneo de Uruguay. De seis tiempos en tres partidos, la selección fue superada con claridad en cinco. Ni en defensa ni en el medio ni en ataque se encontró funcionamiento sincronizado, y por más cambios que hiciera el entrenador no se iban a encontrar.
Gran Bretaña: Jack Butland, Neil Taylor, Steven Caulker, Micah Richards, Rayan Bertrand, Tom Cleverley, Joe Allen, Aaron Ramsey, Scott Sinclair (90′ Jack Cork), Craig Bellamy (78′ Danny Rose), Daniel Sturridge (90′ Craig Dawson)
DT: Stuart Pearce
Uruguay: Martín Campaña, Matías Aguirregaray, Alexis Rolín, Sebastián Coates, Ramón Arias, Diego Rodríguez, Egidio Arévalo Ríos, Gastón Ramírez, Tabaré Viudez (58′ Nicolás Lodeiro), Luis Suárez, Edinson Cavani
DT: Oscar Tabárez
Gol: 45´Sturridge (GB)
Jueces: Yuichi Nishimura, Toru Sagara, Toshiyuki Nagi (Japón)
Estadio: Millenium de Cardiff
Fuente: www.quenonino.com.uy
